Hoy en día existen muchos tipos de juegos y
juguetes que presumen de potenciar diferentes ámbitos de desarrollo del niño.
En muchas ocasiones se trata de materiales sofisticados, costosos y con una
estrategia de marketing y publicidad que hace que se cuelen en nuestras casas a
través de diferentes medios (televisión, catálogos…). A veces es más adecuado
ofrecer recursos sencillos, al alcance de casi todos los bolsillos y que
fomenten el juego libre. Otra opción puede ser que el niño participe en su
construcción, que posibiliten diferentes usos y con complejidad creciente, de
manera que acompañe al niño durante un periodo de tiempo mayor.
Es importante que los padres y los profesionales seamos
críticos y reflexivos a la hora de ofrecer juegos/juguetes a los menores. En el
ámbito más familiar hay que tener en cuenta que el niño debe elegir el tipo de
materiales que prefiere utilizar, siendo la labor del adulto ofrecer recursos
variados y que estimulen distintas áreas del desarrollo infantil.
Pero, ¿qué debemos ofrecer a nuestros hijos?. En el
post de recomendaciones para escribir cartas a los reyes magos ya dábamos características genéricas que deben de
tener los materiales de juego y aprendizaje. Aquí os hablamos concretamente de
alguno que consideramos que no debe de faltar en nuestras casas:
- Cuentos infantiles: la literatura debe de estar
presente en el niño desde el mismo momento del nacimiento e inicialmente
en forma de voz transmitida por el cuidador/a principal. Pasando por los
cuentos de tela, para jugar en la bañera o al cartoné. El primer paso es
que los toquen, los manipulen, los observen, los escuchen… Los cuentos
estimulan todos los ámbitos de desarrollo (sensorial, cognitivo,
afectivo…). La biblioteca es un recurso gratuito y al alcance de todos que
podemos utilizar de manera periódica para fomentar desde pequeños el gusto
por la lectura. Combina cuentos que:
- Puedan manipular ellos, por
ejemplo, los de cartoné.
- Sean visualmente muy atractivos,
por ejemplo, los pop-up.
- Incluyan texturas, lengüetas,
circuitos para repasar con el dedo…
- Traten temas relacionados con el
día a día del niño, por ejemplo, muerte, rabietas, enfados, enfermedades, nacimiento de un hermano…
- Libros-juego, que además de
leer, inviten al niño a hacer algo, como un libro o el libro inquieto.
- Cuentos que fomentan la atención
y la observación, donde haya que buscar personajes, animales… Algunos ejemplos son quien, que, quien, colección busca y encuentra o el libro más divertido del mundo.
- Relatos que incluyan sonidos
(instrumentos musicales, canciones…), como los de la colección la cereza
o nuestro querido colorazón.
- Cuentos rimados o en verso, como la colección de la cuna a la luna.
- Cuentos para llevar encima.
Conoces los minilibros imperdibles o los minis. No ya excusa para no
llevar algo así en el bolso.
- Los quiet-books o libros tranquilos. Suelen estar hechos con fieltro y telas. Incluyen por regla general actividades para que los niños se entretengan y aprendan conceptos sencillos.
Ten en cuenta que hay literatura
infantil a partir de 0 años y que las edades son siempre orientativas (aunque a
veces desorientan): hay niños de infantil que manejan con soltura cuentos
destinados a primaria y niños de primaria que prefieren libros orientados a
educación infantil. Todos los niños/as son susceptibles de disfrutar con la
literatura infantil. Solo tenemos que encontrar el cuento adecuado.
- Rompecabezas y puzzles: otro de los grandes clásicos
que estimulan la motricidad fina, el aprendizaje espacial y la
creatividad. Hay puzzles para todas las edades (recordad, orientativas),
de diferentes materiales y temáticas. Muchos puzzles y rompecabezas solo
ofrecen una posibilidad de solución. Sin embargo, ya empezamos a encontrar
en el mercado, por ejemplo, rompecabezas y puzzles que permiten múltiples
combinaciones y que desarrollan la imaginación.
- Juegos de construcción: estimulan los mismos ámbitos
que los anteriores y hoy en día la oferta es muy amplia. Algunos
interesantes son los megablocks, los lego, el plus plus, spielgaben,
magformers_iberia… Las posibilidades de juego son infinitas y la
tridimensionalidad ofrece un valor añadido a este tipo de materiales.
- Juegos de mesa: además de los clásicos juegos
de mesa que no faltan en cualquier casa (oca, parchís, dominó…) existen
otros específicamente diseñados para los más pequeños y susceptibles de
desarrollar diferentes competencias. La marca alemana HABA tiene juegos
muy divertidos que se pueden usar a partir de los 2 años de edad, como por
ejemplo, el osito hambriento, juego de memoria el frutal, robazanahorias,
piratas de la suerte o mi primer tesoro de juegos. Este tipo de juegos de
estar sentado, seguir reglas, esperar turno, etc. fomentan la atención y
el permanecer en una tarea motivadora durante breves periodos de tiempo.
Constituyen un estupendo recurso para pasar un rato divertido en familia.
- Materiales de la vida diaria: pinzas, macarrones, garbanzos,
tapones, botellas de plástico o material reciclado en general. Para jugar,
para entretenerse, para aprender no es necesario juegos o juguetes ya
diseñados para ese fin. Hoy en día internet está lleno de ideas que se
pueden hacer con materiales sencillos y de los que disfrutamos, tanto del
proceso de creación como del resultado final… Por ejemplo, a hacer juguetes caseros con materiales reciclados, juegos educativos caseros o juegos infantiles caseros. En pinterest también tienes muchas ideas de juegos para niños con materiales sencillos y de la vida diaria.
- Actividades extraescolares: puede ser adecuado complementar
las horas en el colegio con alguna otra actividad que sea del interés de
los niños. Siempre defendemos que los pequeños deben de tener tiempo para
jugar y que no es recomendable un número excesivo de extraescolares. Sin
embargo, una o dos a la semana (en función de la edad y número de horas de
dedicación) puede ser beneficioso. Una idea es combinar algún deporte con
otra de carácter más lúdico o artístico. Actividades como fútbol, música o
baile pueden ser tan adecuadas como inglés, ajedrez o robótica. Lo más
importante es que los niños manifiesten motivación hacia ellas.
- Actividades de fin de semana: de igual modo, planificar
salidas familiares durante los fines de semana, puentes o vacaciones
ofrece otras posibilidades de disfrute de ocio y tiempo libre fundamental para el desarrollo del niño. En Asturias
tenemos una gran variedad de ellas, algunas de carácter gratuito y otras
de pago. Desde cuentacuentos en librerías especializadas en literatura
infantil, pasando por teatro para niños, visitas a museos, paseos en
barco, rutas a caballo o senderismo, merenderos o espacios de restauración
con zonas infantiles… Las posibilidades son infinitas. Hay algunas páginas
web, de Facebook y blogs que informan sobre eventos de estas
características en distintas zonas de nuestra comunidad, como por ejemplo,
paracrios, esparcer o queverdeasturias.
- Lo que no debe faltar en casa: materiales como plastilina,
ceras/pinturas/colores, tijeras, pegamento, cartulina, papel… constituyen
un kit básico “antiaburrimiento” para tardes lluviosas de invierno. Son
recursos muy socorridos que se pueden usar de manera libre o dirigida. A
veces solo hace falta echarle un poco de imaginación y mezclar materiales.
El resultado puede ser realmente sorprendente.
Para terminar decir que esta entrada no pretende
ser un listado exhaustivo de todos los tipos de juegos/juguetes y materiales
que nos podemos encontrar. Se nos quedan muchos en el tintero, como por ejemplo
los disfraces, los orientados a desarrollar el juego simbólico (casitas,
cocinitas, coches…), los experimentos “científicos”… Hoy en día hay tanto y tan
variado que lo ideal es combinar varias cosas en función de edades, intereses,
presupuesto y tiempo. ¿Por dónde vas a empezar tú?. ¿Nos das alguna idea nueva?