Terminamos el año
con un cuento de ediciones jaguar escrito e ilustrado por la asturiana
Raquel Bonita. Por si no lo conocéis, se llama ¿Por qué los dragones no usan
chistera? y tuvimos la suerte de escucharlo en un Cuentacuentos que hizo la
autora en la librería Imperia de Gijón, el pasado 29 de diciembre.
¿Que por que nos
gusta?. En primer lugar porque es un cuento rimado, de estructura sencilla y
escrito en mayúsculas. Esto lo hace idóneo no solo para ser contado, sino para
primeros lectores. El formato es en cartoné con una medida aproximada de 24x24
y 32 páginas en total. Yo lo recomendaría a partir de los tres años y para toda
la etapa de infantil, sin embargo también creo que se puede introducir un poco
antes y mantener en los primeros cursos de primaria, porque en el fondo los
libros no tienen edad. A pesar de la sencillez de la historia, es capaz de
sorprendernos casi en cada página. Por supuesto, también el final es
sorprendente y es de esos cuentos que escuchas con cara expectante y sonrisa
continua. Nos encantan los libros divertidos. Es cierto que los que trabajan
conceptos, valores, emociones… son estupendos y muy recomendables. Pero de vez
en cuando un cuento que simplemente pretende sorprender, divertir y hacer reír
es un acierto. Tampoco queremos que os quedéis con la idea de que no se pueden
trabajar cosas a partir de este libro. Por ejemplo, ¿que pasa con lo que hay
dentro de la chistera?, ¿os habéis fijado lo que era?... y construir con los
niños una historia que acompañe al argumento principal. Si, tenéis que leerlo
para saber a que nos estamos refiriendo…
Por otro lado, las
ilustraciones son realmente preciosas. Están hechas fundamentalmente con diferentes
formas que se agrupan para crear los escenarios y personajes principales. La
paleta de colores es de tonos pastel y de verdad que cuando lo tienes cerca
sientes la necesidad de abrirlo y disfrutar de cada imagen. Por si esto no fuera
suficiente, Raquel nos contó la peculiar técnica que empleó para ilustrarlo: estampación
con sellos de diferentes formas creados con goma eva. Nos hizo una demostración
allí mismo y nos prometió que la próxima vez haríamos un taller para que los
niños pudieran hacerlo ellos mismos. Yo estoy por llamarla para ver si hacemos
uno en alguno de los coles de la zona de influencia del EOE…
Además, a los que
compramos el libro (por supuesto ya luce en nuestra estantería) nos hizo en la
guarda del mismo un dragón con una pequeña dedicatoria para los destinatarios
del mismo.
En resumen, otro cuento
para tener en cuenta en casa o en el cole. ¿Os apetece tenerlo?